Qué ver y hacer en Salamanca
Salamanca es cultura, naturaleza y gastronomía en una cómoda ciudad llena de calles peatonales. En este artículo te contamos todo lo que no te puedes perder en tu viaje.
Qué ver en Salamanca en un día
Si solo tienes 24 horas para estar en Salamanca, con la ruta que te hemos preparado podrás exprimir cada segundo, más todavía alojándote en nuestro céntrico hotel de 3 estrellas en Salamanca, el Hotel Silken Rona Dalba, ya que podrás ir caminando a todas partes. Te contamos nuestras recomendaciones a continuación:
Después del magnífico desayuno en nuestro buffet libre, te proponemos empezar el día descubriendo la magnífica Plaza Mayor de la ciudad (literalmente a 5 minutos del Hotel).
De hecho, si tienes que quedar con alguien, te sugerimos que le cites debajo del reloj del Ayuntamiento de la Plaza Mayor, ¡es lo que hacemos todos los salmantinos! Y mientras esperas, puedes ir descubriendo los maravillosos detalles que alberga este espacio único. Como los medallones que hay debajo de cada uno de los arcos representando a personajes destacados en la historia de España.
También puedes imaginar cómo era la plaza hace años. Cómo en una época de represión, los habitantes de la ciudad la utilizaban para intercambiar mensajes con personas de distinto sexo. Las mujeres paseando siempre en un sentido de las agujas del reloj, los hombres hacia el otro, de manera que, al final, siempre se acababan cruzando.
Y para seguir descubriendo más de la historia de la magnífica ciudad que es Salamanca, puedes apuntarte a alguna de las visitas guiadas que ofrecen en la Oficina de Turismo situada en la misma Plaza Mayor. Si, al contrario, prefieres explorar la ciudad por tu cuenta, estos son los siguientes pasos del recorrido que te proponemos:
- Todavía en la Plaza Mayor y con el reloj a tu espalda, dirígete a la fachada que te quedará enfrente y sal por el arco de la derecha. Estarás pasando por la Plaza del Corrillo donde, también esculpidos entre los arcos, podrás encontrar los días de la semana.
- En la Rua Mayor podrás ver: la Casa de Las Conchas, la Universidad Pontificia o Clerecía (¡majestuosa donde las haya!) y la Catedral Nueva en la Plaza de Anaya (en Salamanca tenemos dos Catedrales).
Además de admirar la preciosidad del edificio, el reto está en descubrir al astronauta escondido en la profusa decoración añadida durante las restauraciones de 1992. No te vamos a decir dónde está, ahí el truco ;) Si te animas a visitar la Catedral por dentro, puedes preguntar también por el recorrido Ieronimus, que te permitirá acceder a las torres medievales.
- Para continuar con la ruta, sigue por delante de la fachada principal de la Catedral por la calle Tentenecio, que se llama así porque “cuenta la leyenda que una vez San Juan de Sahagún caminaba por ella cuando se le acercó un toro enorme que corría enloquecidamente. Sahagún le gritó: ¡Tente, necio! y el toro, asombrosamente, se paró mansamente”.
- Cuando llegues a la Calle Gibraltar, gira a la izquierda y llegarás al Museo Casa Lis. Se trata de un Museo Art Nouveau y Art Decó que te animamos a visitar aunque solo sea por sus fantásticas vidrieras artísticas. Alberga, además, una fantástica colección de muñecas de porcelana francesas del s. XIX que ha sido definida por los expertos como ¡la mejor expuesta al público a nivel mundial!
- Más adelante, llegarás al Patio Chico, topándote de frente con la fachada de la Catedral Vieja. Bonita, eh? Desde este punto, encontrarás indicaciones para llegar al Huerto de Calixto y Melibea, para que hagas un pequeño descanso.
- Con las pilas recargadas, vuelve sobre tus pasos hasta la confluencia entre la Calle Gibraltar y la Calle Tentenecio para dirigirte al Puente Romano, principal acceso a la ciudad en otros tiempos.
De camino, pasarás por el Museo de Historia de Automoción de Salamanca, imprescindible si te gustan los coches históricos. Al salir, aprovecha para contemplar la espléndida fachada sur de La Casa Lis (si tienes oportunidad de hacerlo por la noche, merece la pena).
El siguiente objetivo es el Convento de San Esteban, pasando por el Convento de las Dueñas donde venden los “amarguillos” que las monjas elaboran. También impresiona, ¿verdad?
- Desde la calle de San Pablo podrás volver a la Plaza Mayor pasando por delante del Palacio de Orellana y el Palacio de la Salina, antiguo palacio señorial, que como su nombre indica, también sirvió las veces de depósito de sal y que hoy es la Diputación Provincial.
- Ya para acabar la ruta del primer día, busca el Café Novelty en la Plaza Mayor, el café centenario más antiguo de Salamanca y enclave fundamental de la vida social, política y cultural, donde se daban cita a diario personajes tan famosos como Carmen Martín Gaite, Miguel de Unamuno o Gonzalo Torrente Ballester, entre otros muchos de los grandes.